Números caprichosos

Me odio, me odio, me odio cuando deseo algo, por que me vuelvo caprichosa y obsesiva. Pero si de hombres se trata, soy mas que infame!

Últimamente un número se ha convertido en esa tonada que no dejas de tararear, se ha convertido en el denominador de todas mis ecuaciones con fracciones, es el resultado de toooooooodos lo cálculos mentales que realiza mi cabeza; y eso de verdad me inquieta!

Se que no es amor, tal vez infatuación, aunque casi estoy segura que es una vil necedad! Por que racionalizando la situación ese número, no es una novedad. No niego que su capacidad para resolver polinomios es basta, pero a mi, no me basta!

Lo deseo, solo para tenerlo? Lo deseo, por que no lo tengo? Lo deseo, por que no tengo otra cosa que hacer? No, no...

Pero siendo sincera y hasta casi un poco cínica; mi problema es que cuando deseo un número, quiero repetir y cuando por fin lo tengo para repetir, me doy cuenta que lo que quiero, es el siguiente numero de la lista! Neeeeeeeeeeeeeeeeeeeext!

PD Hoy en el rincon... SAN ANTONIO, mi novio!!